domingo, 16 de febrero de 2020
Léeme dos veces
Léeme dos veces, esto es importante. Léeme dos veces porque sólo me tendrás una. Puede que sea suficiente con esta vez, o puede faltarnos vida, aire y tiempo. Me convertiré en eso que desees todos los días e intentaré dar lo mejor de mí para que esto funcione. Te salvaré las veces que haga falta y asesinaré a todos los eneros que vengan a jodernos el año por ti. Me enfadaré las veces necesarias, ni una más ni una menos. Tal vez haya días en los que no llegarás a entenderme, pero no te preocupes, esos días me alejaré para acercarme con mucha más fuerza. No habrá miedos, pero dame el tiempo necesario para que no los haya. Seré tan independiente que incluso llegarás a preguntarme si todo está bien. Seré un desastre, imprevisible, estaré un poco loca, pero siempre tuya. Te cederé el paraguas los días que llueva porque a mí eso de tener los papeles de dama y caballero bien definidos no me gusta. Pagaré las cenas que me dé la gana, te taparé cuando te quedes dormido en el sofá de mi salón y seré ese hombro en el que llorarás las veces que te haga falta. Bailaremos en el salón de mi casa, eso de salir de fiesta, ya irás descubriendo que, no es lo mío. Madrugo todos los días, ya sea lunes o domingo. Los desayunos en la cama, junto a ti y a tus besos. Te regalaré flores e intentaré sorprenderte las veces que pueda. Te colgaré el teléfono cuando te pongas pesado, te callaré a besos el domingo e intentaré volverte loco justo antes de salir por la puerta, para que te quedes un rato más. Te prometo que intentaré que hagamos todos los viajes exprés que podamos, llevarte a los conciertos que más te gusten y hacer una fiesta de todos esos días que más te pesen. Prometo decirte que como tú no hay nadie cuando no lo haya y te seré totalmente sincera cuando pierda el equilibrio en nuestra cuerda floja. Haré que cada día parezca el último día y alguna que otra vez me haré la dura para que no te relajes. Prometo mirarte con el mismo interés que miras a tu equipo favorito en el último minuto de partido, ver tu película favorita con una cerveza en la mano, reírme hasta que duela. Te prometo ser intensa en todo lo que hagamos, tomármelo en serio, enseñarte todas mis cartas, incluso las que tengo en la manga. Te pediré que nos casemos solos, tú y yo donde más te guste, a la hora que quieras y sin testigos... no nos hacen falta. Te cambiaré las preguntas si las respuestas te sobran, y no te pediré nunca que te quedes, porque si eres tú sabrás de sobra cuando quedarte. Seré la mejor mientras tengas claro que lo soy. Así que dicho esto, léeme dos veces mejor. Porque alguien que será tan de verdad, tan inmensamente cierta es imposible que se rompa dos veces. Así que por favor, lee esto dos veces antes de que se haga demasiado tarde.
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