Qué fácil es catalogar a otros sin tener idea de lo qué se dice, de a quién se dice y de por qué se dice.
En mi caso, hace poco me dijeron que mis textos eran muy malos y que no valían la pena ser leídos, que sólo soy una tía con un blog y con Instagram. Y aquí es cuando yo digo y dejo claro que nunca me he catalogado como escritora, ni lo pretendo, sólo soy una persona que pone lo que siente y piensa debajo de una foto o en una entrada de mi blog. De hecho, o que escribo lo escribo para mi, si no te gusta no lo leas, no estás obligado a hacerlo. Así que si lo que escribo no está a nivel de Góngora o de Quevedo es porque mi meta no es ser como ellos. Mi meta es ser mejor persona y escribir lo que quiero guste o no, siendo yo. Quizás haya gente que no entienda que yo no invierto más de cinco minutos en escribir esto y que lo hago por gusto y no por obligación. Así que si piensas que esto es una basura mírate a ti mismo y piensa si tú lo harías mejor o si en realidad me importa lo que tu hagas. Cuando lo que debería importarte es que te guste a ti porque lo que plasmas es algo tuyo para ti y no para otros... Como bien se dice " si no te gusta no mires, nadie te obliga". Criticar por aburrimiento dice mucho de tus valores. Y no es miedo a la crítica, es asco a os idiotas que van de críticos profesionales, que son los que más deben callar. Es martes, qué más se puede pedir. Feliz tarde :)
No hay comentarios:
Publicar un comentario